lunes, 14 de septiembre de 2015

Factores de riesgo y afectaciones psicológicas por VIH/SIDA



Hace ya más de 30 años que las diferentes que la comunidad científica comenzó su empeño en estudiar uno de los problemas de salud más preocupantes alrededor del orbe: el VIH/SIDA. Esta enfermedad ataca principalmente aquellas sociedades de bajos y medianos ingresos, lo cual posiciona a México como un país en donde existe una alta probabilidad de contraer la enfermedad.

            Los factores que predisponen el contraer VIH, son principalmente conductas de riesgo de tipo psicosocial tales como:

·         Conducta sexual irresponsable: teniendo relaciones sexuales con múltiples parejas, sin utilizar métodos de prevención como el preservativo o condón.

·         Drogodependencia: sobre todo aquellos consumidores de opioides (heroína, oxicodona, morfina,  codeína, petidona y metadona). Por motivo de la vía de administración que es inyectable y el alto nivel de adicción que producen. Generalmente no existen las medidas de higiene adecuadas para la inyección lo cual aumenta la posibilidad de infección.

·         Diversos estudios señalan que existe una relación entre el alto consumo de alcohol y el contagio de VIH. Se señala que la ingesta de alcohol predispone prácticas sexuales de riesgo.

·         Las poblaciones marginadas, personal médico o en condiciones de hacinamiento tienen mayor probabilidad de contagio: trabajadores sexuales, profesionales de la salud, inmigrantes, adictos, homosexuales, presos, pobladores de asentamientos irregulares y enfermos mentales.

Las consecuencias psicológicas del VIH se parecen mucho a aquellas de otras enfermedades que son potencialmente mortales como el cáncer y la diabetes. Al principio, las personas niegan la enfermedad pensando que no puede ocurrirle a ellas, su psiquismo no puede procesar la posibilidad real de morir. Esta etapa sin embargo, supone un alto riesgo social;  el portador de VIH continúa con sus conductas de riesgo infectando a otras personas aún con la conciencia de saber que posee el virus.

      Cuando se va formando una mayor conciencia de tener la enfermedad los principales problemas psicológicos son la ansiedad y la angustia derivados de afrontar un acortamiento en la esperanza de vida, los regímenes terapéuticos, la estigmatización y la sensación de falta de apoyo de familiares y amigos.
En esta etapa existe riesgo  suicida sobretodo cuando existen antecedentes de trastornos depresivos, consumo de sustancias, baja tolerancia a la frustración o una personalidad con tendencia a la impulsividad.

Uno de los aspectos que más preocupan a los trabajadores de la salud mental son los problemas psicológicos y neuropsiquiátricos que son directos de la infección por VIH y su tratamiento como lo son:

·         Encefalopatía por VIH (Torpeza motora, mal equilibrio, temblores, perdida de memoria y de la capacidad de concentración; letargo, apatía, pérdida de lenguaje y de la espontaneid.
·         Estados maniacos (inquietud, falsa euforia, impulsividad, hipersexualidad)o por el contrario,  depresión.
·         Disminución de rendimiento cognitivo  e intelectual.
·         Demencia.
    Algunas terapias para variantes de los virus más resistentes pueden provocar como efectos secundarios, nerviosismo, apatía, delirios y alucinaciones.
·         Los niños lactante positivos en VIH pueden tener problemas de desarrollo motor y cognitivo.


¿Qué hacer para disminuir estos problemas?

Por principio, la integración de la salud mental en las iniciativas y programas relativos al VIH/SIDA. Por ejemplo, La OMS ha preparado una serie de módulos y material de capacitación para la integración de las intervenciones de salud mental en los programas terapéuticos antirretrovirales. Se deben incluir la evaluación de los trastornos mentales y de consumo de sustancias nocivas. Los proveedores de atención primaria de salud, incluidos los asesores preventivos sobre VIH, además de los servicios de salud mental y atención de trastornos por consumo de sustancias (anexos)  tienen que colaborar estrechamente con los relativos a la intervención sobre pacientes con VIH/SIDA en todos los niveles a fin de facilitar una acción coordinada en la que intervengan otros recursos pertinentes basados en la comunidad que atienden.

Psic. José Luis Ramírez Esparza